La detección de intrusos en el exterior en especial en instalaciones con terrenos muy extensos es uno de los retos más significativos para muchos proyectos de seguridad.

En ocasiones debido a su gran superficie las instalaciones se encuentran en áreas remotas, como es el caso de plantas fotovoltaicas o centros de distribución. En otros casos se trata de proteger grandes extensiones durante horario nocturno, por ejemplo en polígonos industriales urbanos, outlets o zonas de construcción.

Por su gran extensión, la seguridad de estas instalaciones suele controlarse de manera remota y la videovigilancia es esencial en un espacio tan amplio para poder confirmar si se trata de una alerta real y que el personal de seguridad pueda tomar la repuesta adecuada cuanto antes. Mas allá de la verificación visual, el mayor reto al que se enfrentan los equipos de seguridad en remoto es detectar con precisión en qué lugar del perímetro se encuentra el intruso para captarlo cuanto antes y evitar el robo o daño a las instalaciones.

Optex descubra proteccion terrenos extensos redwall sip

Los sensores inteligentes Redwall han sido diseñados para conectarse a cámaras PTZ o fijas y activar el sistema CCTV cuando ocurre una intrusión, de manera que los equipos de seguridad en remoto puedan con rapidez verificar alarmas y captar al intruso.

A diferencia de las cámaras, el sensor no ve afectada su capacidad de detectar cuando hay sombras o deslumbramiento intenso, por ejemplo por los faros de un coche, por lo que ofrece una detección de movimiento muy fiable y estable. El sensor es además capaz de identificar si la persona se está acercando o alejando del sensor, lo que ayuda a estimar la gravedad de la amenaza, guiando a las cámaras en el seguimiento del intruso.

Los sensores volumétricos 3D Redwall SIP cuentan con hasta tres zonas virtuales con selección de sensibilidad de detección independiente y salida de alarma para seguimiento del intruso, pudiendo guiar a las cámaras a través de las zonas para proporcionar al personal de seguridad la mejor vista del intruso. La zona cero es aquella directamente bajo el sensor, cubriendo un espacio de 360 grados alrededor del sensor y protegiendo al propio sensor frente a algún intento de manipular el sensor; la zona media y zona lejana (en algunos sensores alcanzando los 100 m).

Resistencia al vandalismo

Es habitual que el criminal intente dejar ‘fuera de juego’ al sensor, lo que pone en valor que los sensores cuenten con medidas de autoprotección. Además de una estructura robusta, los sensores Redwall cuentan con una serie de funciones como salida de sabotaje, anti-enmascaramiento y un acelerómetro para detectar si se ha modificado o no la posición del sensor. Los sensores pueden además activar iluminación de seguridad y sirenas.

Detección fiable y uniforme a lo largo del año

Las instalaciones en áreas remotas con frecuencia se encuentran en terrenos rústicos, expuestos a cambios ambientales, como pueden ser los cambios de temperatura o luz según la época del año. Los sensores Redwall de OPTEX están diseñados para utilizarse en entornos exteriores exigentes y cuentan con una herramienta de ajuste automático de la sensibilidad de detección a la iluminación y la temperatura del ambiente, por lo que no necesitan ser configurados cada vez que cambia la estación del año.

Mas allá de la protección de los espacios abiertos dentro del perímetro y la aproximación a las estructuras, a la hora de diseñar el sistema de seguridad se debe tener la protección completa de la instalación mediante un conjunto de medidas que posibiliten la seguridad de todas las zonas, tanto perimetral, como zona de aproximación, edificio e interior.